Soy Carolita, mamá de una adolescente, (con perfil muy crítico en la fotografía) hija de unos hermosos padres, hermana de unos degustadores seriales, apasionada, amante de las experiencias en la cocina y aficionada del mundo digital. También me gusta viajar por el mundo 🌍, porque me permite estar predispuesta a experimentar nuevas culturas, sabores y olores regionales como de vivir en otros entornos.
Mi relación con la cocina se vio potenciada por una sucesión de hechos inesperados en mi vida. En estos últimos meses, semanas y días escucho frases de halagos como: “qué cocinera”, “que rico te salió”, “que pinta tiene eso” y muchos más que podría enumerar desde el momento en que sentí dentro mío, un clic generador de placer y alegría podes cubrir una pasión, que claramente estaba y no quería reconocer. Por supuesto que también escuché lo gracioso de esta aventura “nooooo ahora cambia el clima”, “si cocinas seguro llueve” ☔️ o consultas como “¿vas cocinar que quiero lavar el auto?”, también podría enumerarlas porque algunas son bien graciosas y ocurrentes.
La realidad, es que siempre me empecine o más bien, me quería convencer, que el recinto de la cocina y todo su equipo de instrumentos, no eran para mí, por lo que aprendí a reírme de mi misma con las coincidencias de los fenómenos naturales que ocurrían cuando cocinaba. Incluso generaba alertas a mis amigos, avisando que cocinaría para que puedan salir de su casa con paraguas y resguardar los coches si fuera necesario. Tal era así la coincidencia, que según lo que cocinaba, mi poder catastrófico traspasaba fronteras, climas y tempestades, sin saber que el fenómeno natural, estaba dentro de mí y no lo había descubierto "La pasión por cocinar".
Aprovechando la cuarentena y que todos tienen los autos resguardados di a conocer a mis redes sociales que encontré una pasión. Hace un poco más de un año, me toco la suerte de comenzar a vivir una nueva vida, aunque ese día recuerdo que mi vida cambio 180°; del día a la noche o de la noche a la mañana (no soy buena con refranes). Después de 22 años de trabajar en una corporativa, con una rutina ejecutiva, me sentí perdida ante la cantidad de oportunidades que empezaba a vislumbrar, es por eso, que digo suerte, porque uno no siempre ve lo bueno de todas las situaciones. Y por convicción sé, que todo lo que nos pasa en la vida, nos fortalece y son grandes experiencias. Experiencias, como las que comencé a vivir, como estar en casa, disfrutar de mi hija, cuidar, ayudar y colaborar con mis padres, y disponer de tiempo para cocinar... si si cocinar, y qué se yo de cocinar, solo sé cambiar climas. Y que equivocada estaba :)
Hoy entiendo, que siempre tuve señales latentes, de que esta pasión estaba en mí y que este disfrute podía ocurrir; lo que no consideraba es que se diera naturalmente. Pero... qué podía hacer yo en la cocina además de lío?. Comencé a pedir ayuda cuando mi mamá, que cocino siempre (como Hestia, diosa de la cocina), dejo de hacerlo. Entonces me vi con ella...“la cocina” y atrás de ella, vivieron todos los consejos, recetas y más recetas. Tenía tanta incertidumbre que no lo podía expresar, después la incertidumbre cedió y pase a la fase de la curiosidad o investigar que podía hacer y cómo, qué podía reemplazar y porqué, la tecnología hoy es una gran herramienta tan poderosa, que sabiendo usarla y divirtiéndome en mis redes sociales, buscando en Internet y demás...llegue a COOKPAD. Y no estaba sola, un tiempo la gaste tanto a la aplicación en buscar cosas fáciles que sentí que era momento de empezar a interactuar, yo dentro de una comunidad, donde de repente tenía amigos y saben qué? Algunos y yo, usamos sal en vez de azúcar ja ja.
También de la mano de una gran amiga, que siempre supo que mis pizzas 🍕 eran las mejores (con humildad les cuento que me salen riquísimas) y que sabía que yo podía ir por más, cargué mi primer receta. Comencé a hacer recetas y cada vez quería más, recetas difíciles, con pocos ingredientes, con aciertos y aprendizaje siempre. Ya no se trata de cuarentena, fenómenos y climas. Todas me gustan y sigo elevando mi nivel, pero dos recetas me marcaron. Unas Cascaritas abrillantadas fue la receta que compartí hacerla con mi mamá y la vi a ella disfrutando cuando me dijo: " sos toda una cocinerita", mis corazón se lleno de emoción al ver que ella volvía a disfrutar de su cocina y que yo hoy, también lo hacía. La segunda receta fue los Tips de palitos, la satisfacción de recibir comentarios y fotos hizo que siguiera en ese camino; en el detalle, en la fotografía y en transmitir la alegría que me genera hacerlo para que sea contagioso. Fui un hit! Y si, me descubrí todo el tiempo disfrutando, siendo consciente de eso. Qué hermoso es entender las señales (algún día les contare de las señales) empezaron a aturdirme diciéndome: tenes capacidad, actitud y amor para hacerlo, lo demás se consigue, ahora a cocinar!!
Entendí y aprendí que no hay una receta, hay ingredientes con un universo infinito de posibilidades, donde cada uno pone su pasión, su amor y su dedicación. Soy Carolita así me encontrás en la comunidad de Cookpad Argentina.
