El cáncer de mama es el tipo más frecuente entre las mujeres a nivel global, y su detección temprana es crucial para mejorar las tasas de supervivencia.
Desde 1985, octubre es reconocido mundialmente como el Mes de Concientización sobre el Cáncer de Mama, con el propósito de aumentar la atención y el apoyo hacia la detección temprana, el tratamiento y los cuidados paliativos relacionados con esta enfermedad. En Cookpad, nos unimos para resaltar la relevancia de la prevención, el diagnóstico y la sensibilización sobre esta enfermedad.
Por eso, hoy queremos enfatizar la importancia de una alimentación adecuada y hábitos saludables para prevenir el cáncer y gestionar los síntomas y tratamientos de esta grave enfermedad.
La dieta desempeña un papel clave, ya que puede ayudar a evitar ciertos síntomas y, en muchos casos, mantener a quienes lo padecen fuertes y bien nutridos.
Pero no se trata de ninguna dieta especial con ingredientes raros o difíciles de encontrar, si no más bien una dieta fácil y saludable con ingredientes frescos, de temporada y muchos colores que son indicativo de vitaminas y nutrientes.
A continuación, cinco puntos esenciales a considerar:
- Optar por grasas saludables: Es recomendable evitar las grasas saturadas, que provienen principalmente de mantecas, carnes rojas y lácteos enteros, así como las grasas trans. En su lugar, elegir grasas de origen vegetal, como el aceite de oliva, frutos secos y palta, integrándolas en tu dieta diaria.
- Incluir una variedad de frutas, verduras y hortalizas a diario: Estos alimentos son ricos en vitaminas y minerales esenciales. Preferir aquellos que contienen antioxidantes y carotenos, como zanahorias, frutas rojas, cítricos y verduras de hoja verde, para satisfacer tus necesidades nutricionales en la regeneración celular.
- Preferir cereales integrales: Cambiar los cereales refinados por sus versiones integrales: pan, pasta, cuscús y arroz integrales, así como avena. Estos alimentos mejoran la salud digestiva y ayudan a prevenir varios tipos de cáncer, incluido el de colon, además de ser más nutritivos.
- Incorporar legumbres: Consumir legumbres como lentejas, garbanzos y porotos al menos 2 o 3 veces por semana. Puedes prepararlas en guisos o ensaladas, combinándolas con verduras, carnes magras, arroz o papas para crear platos completos y nutritivos.
- Mantener un peso saludable: Evitar el sobrepeso y la obesidad es fundamental para la prevención del cáncer. Adoptar una alimentación equilibrada y en porciones adecuadas, realizar actividad física y evitar alimentos como comida rápida, productos procesados y bebidas azucaradas.
¿Qué podemos hacer desde casa para prevenir?
- Fomentar autoexámenes regulares: Es fundamental que aprendamos a examinarnos. No dudes en consultar cualquier anomalía que notes, como bultos, cambios en el tamaño o textura, enrojecimiento, hinchazón, secreciones o cambios en los pezones.
- Mantener una alimentación saludable: Una dieta equilibrada que proteja nuestro organismo es clave. Priorizar alimentos frescos, evitando conservantes y productos ultraprocesados. Incluir frutas y verduras ricas en antioxidantes, alimentos con fibra, grasas saludables y pescados ricos en omega-3.
- Realizar ejercicio físico: Hacerlo regularmente mantiene nuestro cuerpo activo y ayuda a liberar endorfinas, que son analgésicos naturales y contribuyen a la relajación y al control del estrés.
- Limitar el consumo de alcohol: El alcohol se asocia con un mayor riesgo de cáncer de mama. Es recomendable moderar su consumo o sustituirlo por bebidas más saludables, como infusiones, agua con frutas o batidos.
- Hablar abiertamente sobre el tema: Romper con el estigma y tratar el cáncer con naturalidad, conversando con familiares y amigos sobre la importancia de las revisiones y la conciencia sobre el cáncer de mama, puede contribuir a reducir su detección en etapas avanzadas.
Agradecemos a Irene Guirao, la nutricionista de Cookpad por ayudarnos con tan valiosa información.