Las sopas y caldos forman parte de las cocinas de todo el mundo.
En general, llamamos sopa a la preparación de agua hirviendo, junto a ingredientes muy diversos. Existe una infinidad de combinaciones, con pasta, arroz, verduras, carnes… por eso nunca aburren.
En México tenemos una infinidad de recetas memorables de sopas y caldos, que se comen en cualquier época del año ( incluso cuando estamos a 40 grados) pero ahora que empieza el frío las sopas nos ayudan a mantenernos hidratados, nos dan calor y nos reconfortan.
Las sopas pueden ser un primer plato, pero dependiendo de los ingredientes también un plato único, ya que puede contener todos los nutrientes que necesitamos.
El origen de las sopas es muy, muy antigüo, tan antigüo como la historia de la cocina. Aunque su origen es incierto se asocia al periodo Neolítico, con el descubrimiento del fuego, el encontrar un lugar para hervir el agua que pudo haber sido un hueco en una piedra o quizá un recipiente, aquel momento en el que a alguien se le ocurrió poner a hervir agua y algún trozo de carne o verduras y descubrir que esa agua había capturado el sabor del alimento debe haber sido un momento increíble.
Como datos curiosos, fue en la época de la Revolución Industrial se crearon las sopas instantáneas y en cubitos. Y ya en 1958 el taiwanés-japonés Momofuku Ando , inventó una de las sopas instantáneas más populares, los fideos instantáneos ramen, como una forma de resolver el problema del hambre que había en Japón después de la Segunda Guerra Mundial.
Comer sopas contribuye a tener una alimentación variada, su preparación es sencilla y nuestra imaginación es el límite para prepararla en casa, además es económica y permite aprovechar el líquido de la cocción, y los ingredientes que tenemos en casa.
Otras ventaja es que son fáciles de digerir, por lo que son muy buen alimento para los pequeños, para los adultos mayores, así como para cualquier persona a quién se le dificulte comer alimentos sólidos.
Algunos tips:
Incluye especias y hierbas de olor para elaborar tus sopas.
Puedes hacer tu propio consomé en polvo en casa, este es mucho más sano.
Cuece las verduras solo lo necesario.
Incluye en tus sopas legumbres como frijoles o garbanzos.
Evita las sopas muy procesadas, lo mejor es prepararlas en casa, son mucho más saludables y ricas.
Las sopas son de esos alimentos que no pueden faltar en nuestras mesas, porque además de las ventajas en cuanto a sencillez, nutrición y economía, son de esos platos que son un recuerdo cotidiano en familia, las sopas son amor cucharada a cucharada.
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¡Hasta pronto!
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